Relacione cada uno de los accidentes con los primeros auxilios que se proporcionarían a los accidentados, escribiendo el número en el recuadro que le corresponda.

Un señor realiza reparaciones en el techo de una casa, cae al suelo y recibe un fuerte golpe en la cabeza que le ocasiona una herida.
Un niño pequeño introduce un botón en su boca y comienza a tener dificultades para respirar, se pone pálido y tose.
Una señora golpea accidentalmente una olla que contiene aceite hirviendo y se le derrama en la pierna.
Una señora se corta y tiene una hemorragia.
 
1. Alejar al accidentado o retirar todo lo que represente un peligro para su vida, por ejemplo explosivos, derrumbes, fuego, cables de luz, paso de vehículos. Si no existe peligro, evite mover a la persona.
2. Hacer presión directamente sobre la lesión para evitar la salida de sangre.
3. Colocarse detrás de la persona, rodearle el pecho con un brazo y con el otro darle varios golpes fuertes en la espalda. No intentar meter los dedos porque puede empujar más el objeto.
4. Poner de inmediato agua fría sobre la lesión hasta que el ardor disminuya o desaparezca. No reventar las ampollas.


 

   
   
 

   

Los primeros auxilios son la atención inmediata que le damos a una persona que tuvo un accidente, mientras llega el médico o la llevamos a un centro de salud. ¡En muchos casos los primeros auxilios pueden salvarle la vida a una persona!



Solicite a su asesor/a o responsable de la plaza, para consultar un médico/a o a una enfermera para ampliar su información acerca de los primeros auxilios que se deben proporcionar en los casos anteriores.

Escriba la información y compárela con la que usted anotó antes. Consiga también datos de teléfonos y domicilios de personas e instituciones a las que pueda recurrir en caso de emergencia.

Solicite apoyo a sus familiares y amigos, entre todos investiguen y practiquen lo que se debe hacer en cada uno de los accidentes que se presentan con mayor frecuencia en casa. Con la información que recopiló se pueden elaborar carteles para mostrarlos a familiares
y vecinos y compartir con ellos las recomendaciones.
 




Conserve la calma.

Averigüe cómo ocurrió el accidente.

Pida ayuda al personal de salud más cercano.

Aplique los primeros auxilios, sólo si está usted capacitado/a.

No mueva a la persona lesionada, a menos que sea estrictamente necesario.

Revise si se siente el pulso en el lesionado.
 


En el menú de la izquierda entre al Manual de primeros auxilios y consulte el tema Hemorragias.


Complete el siguiente párrafo escribiendo en los recuadros el número que corresponda.

Un de primeros auxilios contiene las cosas y necesarios para dar los primeros , atender enfermedades y leves.

1. accidentes
2. auxilios
3. botiquín
4. medicamentos

 


Con la participación de toda su familia, decidan las formas en que se pueden organizar y solicitar apoyo a otras personas de la comunidad para hacer un botiquín para todos.



 

Por grandes o pequeños que sean nuestros conocimientos, siempre podemos ayudar. Antes
de aplicar los primeros auxilios a una persona lesionada, debemos reconocer nuestros límites, lo que sabemos hacer. Sobre todo, porque en esos casos podemos causar más daño y, más aún, poner en peligro la vida del lesionado. Hagamos únicamente lo que sabemos hacer. Cuando tengamos alguna duda sobre qué hacer por una persona recién accidentada, es mejor acudir inmediatamente con un promotor de salud, un/a médico/a u otra persona del sector salud y no perder tiempo en adivinar qué podríamos hacer.