Brindar los conocimientos básicos
de primeros auxilios.
Señalar las acciones inmediatas y adecuadas
para resolver una urgencia en el lugar del accidente, lo que ayudará
a salvar vidas, disminuir el dolor y lograr que la lesión se
controle y no se complique.
Indicar cómo continuar
la atención al accidentado una vez que se resolvió
la urgencia.
Dar a conocer otras acciones
que aunque no son de primeros auxilios ayudan a la atención
de personas enfermas como son: el control de la fiebre, el uso correcto
del termómetro y la aplicación de inyecciones.
Recomendar algunas formas para trasladar a un accidentado
de un lugar a otro y lo que debe contener el botiquín de primeros
auxilios.
Promover algunas medidas preventivas
que puede poner en práctica, para evitar posibles accidentes.
Fuente:
Mortalidad 1996. Dirección General de Estadística e
Informática, SSA.
En nuestro país durante
el año 1996 las lesiones por accidentes ocuparon la primera causa
de muerte en niños, adolescentes y adultos jóvenes y la
cuarta a nivel general.