El aparato de filtración de nuestro cuerpo

En nuestro cuerpo hay órganos dedicados a regular o mantener más o menos constante la cantidad de agua que existe en él. Estos órganos forman el aparato urinario y actúan como un filtro, que elimina de la sangre las sustancias que el cuerpo ya no necesita y desecha de nuestro organismo.


¿Cuáles son los órganos excretores humanos?

El aparato urinario está formado por dos riñones, dos uréteres, una vejiga urinaria y una uretra.

Los riñones producen orina a partir de los componentes de la sangre. Cada uno mide unos 10 centímetros de longitud. Se encuentran dentro de la cavidad abdominal, detrás del hígado y del estómago. Los riñones filtran de cuatro a cinco litros (que constituyen el total de la sangre del cuerpo) cada 40 minutos, para eliminar de ella muchos de los desechos producidos por las distintas partes del cuerpo. Los materiales útiles vuelven a la sangre.

Los uréteres son dos tubos a través de los cuales viaja la sangre de los riñones a la vejiga.

La vejiga urinaria es un órgano muscular hueco que almacena la orina. Este órgano es elástico y aumenta de tamaño a medida que se va llenando de orina, puede almacenar aproximadamente tres tazas de orina. Para eliminar la orina, sus paredes internas se contraen y esto hace que un anillo muscular o esfínter que controla la base del órgano se abra. La relajación de un segundo esfínter hace posible que salga la orina.

La uretra es un tubo que comunica la vejiga con la parte externa del cuerpo; en la mujer mide aproximadamente cuatro centímetros de largo y se abre al exterior del cuerpo cerca de la vagina. Su función únicamente consiste en llevar la orina al exterior.

En los hombres este conducto mide aproximadamente 18 centímetros, se abre hacia el exterior a través del pene. Tiene una doble función, transporta la orina y, durante las relaciones sexuales, el esperma o semen.


La piel, otro órgano que participa en la excreción

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano; su principal tarea es cubrir y proteger los tejidos internos, pero también participa en la regulación de la temperatura del cuerpo; cuando sudamos, a través de ella se eliminan sustancias que ya no necesita el organismo.

La piel está formada por tres capas: la epidermis, que es la capa más externa; la dermis, la capa intermedia; y la hipodermis, una capa interna. El sudor es producido por las glándulas sudoríparas que se encuentran en la dermis. Estas glándulas son diminutas y tienen la forma de un tubo enrollado que termina en el exterior de la piel en un poro, por el cual sale el sudor.

El sudor es un líquido que contiene distintas sustancias: sodio, potasio, magnesio y cloro. El sudor se produce por la temperatura y humedad del ambiente y al realizar una actividad física intensa, los músculos generan más calor del que normalmente se libera a través de la piel. El sudor, al evaporarse, enfría el cuerpo. Cuando el cuerpo de una persona tiene suficiente agua para producir sudor, puede resistir temperaturas muy altas.

Si una persona ha bebido mucha agua, los riñones eliminan el exceso a través de la orina. Cuando, por el contrario, la persona corre y suda mucho, pierde agua y su organismo disminuye la eliminación de orina.