El SIDA, sí da

El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, también conocido como sida, es la enfermedad de mayor peligro, por eso es importante que usted esté bien informado y sepa cómo prevenir el contagio.

El SIDA es la última fase de una infección causada por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Este virus afecta únicamente al ser humano. El VIH, cuando entra al organismo, destruye las defensas del cuerpo, impidiendo que éste pueda defenderse y atacar a los microbios a los que está expuesto.

El VIH se encuentra principalmente en la sangre y en los líquidos preeyaculatorios, semen, secreción vaginal, sangrado menstrual y leche materna de las personas infectadas o enfermas. El virus puede permanecer mucho tiempo en el cuerpo de una persona antes de que manifieste algún síntoma de esta enfermedad.

El VIH se transmite de una persona infectada o enferma a una persona sana a través de tres vías: sexual, sanguínea y perinatal.

¿Cómo podemos evitar el contagio?

Por vía sexual



Tenga relaciones sexuales sólo con su pareja, siempre que esté seguro de que ninguno de los dos está infectado. Para ello necesitan acudir al médico y hacerse análisis de laboratorio.

Tenga sexo protegido, es decir, use condón de látex, en forma correcta, en cada acto sexual o coito. Esto disminuye el riesgo de contagio.


Por vía sanguinea

Asegúrese de usar jeringas y agujas desechables y nuevas; en caso de usar otro tipo de jeringa, ésta debe ponerse en agua hirviendo durante 20 minutos.

En caso de transfusión sanguínea, verifique que la sangre tenga la etiqueta de “sangre segura” o, por otros medios, asegúrese de que no esté infectada.

No comparta el uso de cepillo de dientes o de rastrillo para rasurar.


En caso de trasplante seleccione al donante y verifique que no esté infectado.

Por vía perinatal

Cuando una pareja desee procrear un nuevo ser y sospeche de una posible infección debe hacerse un examen médico que incluya el análisis de sangre para detectar la presencia del VIH.

Las mujeres embarazadas que resulten infectadas tendrán que someterse a tratamiento para evitar contagiar al nuevo ser.

El SIDA no se transmite al hacer uso de excusados, ropa, sábanas,
utensilios de cocina u otros objetos utilizados por una persona infectada
por el VIH. No existen posibilidades de contagio al platicar, dar la mano, abrazar, besar o al tener contacto con saliva, lágrimas, orina,
sudor o excremento de una persona infectada.
Ni mediante los piquetes de insectos.

La única forma de saber si una persona está infectada por el virus de la inmunodeficiencia humana, es mediante la realización de un análisis de sangre en un laboratorio, hospital o clínica. Existen diversos tipos de análisis, el más conocido y utilizado en México es el llamado ELISA; para hacerse este análisis usted sólo necesita ir en ayunas o esperar seis horas después de haber ingerido alimentos.

Cuando la infección es muy reciente, la prueba puede dar un resultado negativo a pesar de que la persona ya esté infectada, esto se debe a que nuestro organismo aún no ha desarrollado anticuerpos contra el virus del SIDA; éstos son los que detecta la prueba. Por esto, es necesario esperar tres meses desde la fecha en que se pudo haber estado en riesgo de infección, para realizarse la prueba.


¿Qué diferencia hay entre ser seropositivo y tener SIDA?

Se dice que una persona está infectada cuando los resultados de la prueba de detección del VIH señalan que en su sangre se encontraron anticuerpos contra el virus del SIDA. Una persona infectada también se conoce como VIH positiva o seropositiva. Se debe tener cuidado de no confundir los resultados de la prueba para detectar el VIH con el tipo de sangre que tienen algunas personas. Por ejemplo: sangre O positivo o con el factor RH positivo; éstos no indican que se tenga VIH o SIDA.

Una persona vih positiva o seropositiva sí puede contagiar a otras personas aunque ella misma no tenga síntomas o parezca sana, es decir, aunque en ella no se haya desarrollado la enfermedad. Esto provoca que el número de personas contagiadas aumente rápidamente, ya que las personas infectadas transmiten el VIH sin darse cuenta.

Cuando una persona infectada por el VIH empieza a presentar con frecuencia fiebre, sudores, diarrea, pérdida rápida de peso, cansancio, erupciones en la piel o padece enfermedades respiratorias, se dice que ha desarrollado la enfermedad conocida como sida. Es importante recordar que estos síntomas también se presentan en otras enfermedades y que la única forma de saber si están relacionados con la presencia de vih en el organismo es mediante el análisis antes mencionado.

No olvide que…

Un resultado negativo en el análisis de sangre no significa:

Que usted está libre de contraer el virus VIH.

Que ya no tiene que preocuparse por contraer SIDA en el futuro.

Que se está vacunado contra el SIDA.

Que puede tener relaciones sexuales sin protección.

Un resultado positivo en el análisis de sangre no significa:

Que se tiene sida, pero sí que se tiene el virus VIH.

Que se debe evitar tener relaciones sexuales.

Que es imposible llevar una vida normal.

Que se está en riesgo de muerte inminente.

Recomendaciones

Promueva la fidelidad sexual, recuerde que en una relación se involucran nuestros sentimientos, nuestro cuerpo y hasta nuestra propia vida. En la medida en que cuide a su pareja se estará cuidando a usted mismo.


En sus relaciones sexuales use o pida a su compañero usar condón.


Practíquese el análisis llamado elisa por su tranquilidad, para llevar una vida sexual plena y en caso de ser necesario recibir un tratamiento médico oportuno.