Las costumbres también cambian

Revisemos la vivencia de Isaías Reyes Cabrera: ¿Por qué se van?

Para leer el testimonio, oprime el botón que aparece a continuación.

¿Qué piensas de esta lectura?

¿La gente puede cambiar su manera de vivir?
No .

¿Por qué?

¿Has tenido alguna vez que cambiar tu manera de vivir?
No .

¿Por qué?

Si la respuesta es sí, ¿en qué han consistido esos cambios?

¿Para qué piensas que cambia la gente su manera de vivir?

Si la gente y sus costumbres cambian, entonces la sociedad que formamos todos, también se transforma.

No sólo cambian los lugares, sino también la sociedad. Hoy la sociedad mexicana no es igual que antes.

En la época en la que el señor Isaías Reyes Cabrera vivió esta experiencia de emigración a la ciudad de México, nuestro país había dejado de dedicarse mayoritariamente al trabajo del campo. Las ciudades empezaron a crecer, pues la gente buscaba un trabajo mejor remunerado en las fábricas. Gran parte de las labores agrícolas y algunos pueblos quedaron entonces muy abandonados.

La luz eléctrica, el teléfono, la radio, la televisión y los medios de transporte se popularizaron.

El petróleo empezó a ser indispensable para la vida de las personas, porque la gasolina, el diesel, algunas telas y los objetos de plástico se hacían con él. Los productos químicos se desarrollaron ampliamente porque sirven para hacer jabones, fertilizantes, medicinas, alimentos, refrescos y muchas otras cosas que se usan en la actualidad.

Zócalo de la ciudad de México, 1990 Zócalo de la ciudad de México, 1999


¿Quieres ver algunos ejemplos de cambio? Oprime cada uno de los siguientes objetos.

Platica con una persona mayor o con un anciano del lugar donde vives y pregúntale acerca de sus recuerdos, de cómo era antes ese lugar, su gente, sus costumbres, pensamientos y sentimientos. Escribe lo que esta persona te dijo y anota las diferencias que encuentres entre lo que dice el anciano y lo que ves.